miércoles, 16 de julio de 2008

A tiro de piedra-12-CAMPO DE MIRRA



CAMPO DE MIRRA
Campo de Mirra es un municipio de 400 habitantes, situado al norte del valle de Biar, su superficie es de 21'27 kms. Cuadrados, y su altitud media es de 590 m. Dependiendo en cuanto a juzgados del Partido Judicial de Villena. Dista 68 kms de Alicante y 111 de Valencia.
Sus límites son: al Norte, Fontanars ; al Sur Biar, al este Beneixama, y al Oeste Cañada. La superficie del término es llana en el centro y montañosa en los extremos. La población está recostada en las laderas de los cabezos La Fantasmeta y San Bartolomé, en la ribera derecha del río Vinalopó, próxima a su cauce. El clima es continental: los vientos dominantes son: "Llevant, Ponent, Tramuntana i Llebeig". Cruza el término la carretera comarcal de Villena, Ontinyent, Alcudia de Cresplns.
Tradicionalmente, la economía del municipio ha sido eminentemente agrícola, siendo los cultivos más importantes frutales, hortalizas y cereales.
Desde el apogeo de la vid en el siglo pasado se instalaron espléndidas bodegas en todos los edificios de la grandes y medianas propiedades, alcanzándose un importante nivel de calidad en la elaboración de los vinos. También se instalaron algunas almazaras particulares que atendían las necesidades del municipio. Todas estas ancestrales formas de elaboración del vino y el aceite se modernizaron totalmente con la construcción de la actual bodega cooperativa instalada en Beneixama y de la moderna almazara cooperativa que se fundo en la localidad, ambas se constituyeron en la década de los años cincuenta. De todas maneras es evidente, que el ambiente agrícola ha ido decreciendo considerablemente no sólo en el municipio, sino en todo el valle. Hasta el extremo que es mínimo el porcentaje de personas dedicadas en la localidad y de una manera completa a las labores agrícolas.
A finales de la década de los sesenta se iniciaron algunas actividades industriales de tipo familiar, sobre todo del ramo textil, característico de la comarca. Con ello se frenó en gran parte la emigración que venía sufriendo el municipio desde principios de siglo. Alguna de estas iniciativas industriales se consolidó y actualmente, junto a otras industrias agro-alimentarias, muebles, juguetes, etc., auguran una cierta estabilidad económica y demográfica. El mercado del trabajo se complementa considerablemente con un sector de la población que desarrolla sus actividades en industrias y servicios de población limítrofes.

ANTECEDENTES HISTORICOS

En excavaciones realizadas en el cerro de San Bartolomé, en las mismas ruinas de la población y castillo de Almizra, se han localizado restos arqueológicos de la edad del bronce valenciano (1800-800 años a C.), y de la Ibérica (550-218 años a. C) en un castro fortificado que se ubica en el otro cerro de la Fantasmenta, donde aún son visibles diversas construcciones en piedra. Precisamente, entre estos dos cerros hay una gran piedra llamada "Les Graelletes", cuya superficie está cubierta de inscripciones heráldicas atribuyéndose estos signos o petroglifos a la época medieval. Por los vestigios que se van conociendo, este solar ha sido en diversas épocas, asentamiento de diversas civilizaciones, y posiblemente la musulmana haya sido la más importante y de la que más vestigios han llegado hasta nuestros días. Es significativa la cantidad de fortificaciones que se realizan en este valle, principalmente en época almohade, los castillos de Biar, Almizra y Serrella; y las torres de la Fantasmenta, Beneixama, El Negret y Marco.
El valle de Biar, ya es un importante baluarte fronterizo desde la época Omeya, y después con la creación del nuevo Reino por Jaime I, una encrucijada de caminos que partiendo de la antigua vía prerromana del "Camí de Xátiva", comunica las importantes ciudades de Denia, Gandía y la misma Xátiva, con las tierras del interior hacia Murcia y Castilla, Conquistado el castillo árabe el 10 de agosto de 1243, al vencer el caballero cristiano Llorens d'Escals la residencia del alcald Ab-Albah Marhop, fue escenario el año siguiente del histórico pacto entre el monarca Jaime I "El Conquistador" y el infante Alfonso de Castilla, futuro rey Alfonso " el Sabio", estableciéndose las primeras fronteras del antiguo Reino de Valencia.