
Los cuatro acuerdos.
1. No Supongas
— No des nada por supuesto.
— Si tienes duda, aclárala.
— Si sospechas, pregunta.
— Suponer te hace inventar historias increíbles que sólo envenenan tu alma y que no tienen FUNDAMENTO.
2. Honra Tus Palabras
— Lo que sale de tu boca es lo que eres tú.
— Si no honras tus palabras, no te estás honrando a ti mismo; y si no te honras a ti mismo no te amas.
— Honrar tus palabras es ser coherente con lo que piensas y con lo que haces; te hace respetable ante los demás y ante ti mismo.
3. Haz Siempre lo mejor
— Si siempre haces lo mejor que puedas, nunca podrás recriminarte ni arrepentirte de nada.
4. No tomes todo a título personal.
— Ni la peor ofensa.
— Ni el peor desaire.
— Ni la más grave herida.
— En la medida que alguien te quiere lastimar, en esa medida misma ese alguien se lastima a sí mismo. Pero el problema es de él y no tuyo.