El fragmento de vídeo de V de vendetta se me quedó grabado en la retina o más bien en un espacio reducido del cerebro que amplio al blog antes de que se llene de polvo lo poco que me queda de memoria. Toda la vida te dicen que no debes mentir, pero resulta que en mi profesión no hay otro remedio, en el momento que pones la cámara estás manipulando, mintiendo, la misma situación/acción/escena desde otro ángulo, otro plano, otra composición, sonido, música, voz y colores, no tiene nada que ver.
Cuando apuntas con la cámara estas poniendo una mirada ,esa mirada no existe en la realidad, es una interpretación tuya que transmitirás al público, de ti depende que el público descubra una verdad o siga engañado, de Artistas también hay que mienten como los políticos.
EN EL MUNDO REAL
Pero esta norma no es sólo aplicable al cine, sino también en las relaciones. Recuerdo la anécdota de un Jefe de un restaurante donde una trabajadora delató que una compañera robaba dinero de la caja, el jefe sabía que si le decía a la ladrona que su compañera le había delatado tendría dos problemas:
1- tendría que despedir a la ladrona, que era una buena trabajadora.
2- crearía una situación terrible para la trabajadora honesta, con toda la buena intención del mundo de ayudar metería en su vida una enemiga por vida.
Así que le dijo a la trabajadora honesta que no dijera nada, y que el nunca diría que lo dijo.Para solucionar el problema creó una mentira para que la propia ladrona se delatara. Puso una cámara en una esquina del restaurante, y al final del día cuando ya no hay nadie y aprovechan para comer todos juntos (si habéis trabajado en un restaurante conoceréis la situación) el Jefe se sentó en la mesa con una cinta en la mano, y dijo,
-¿Veis allí arriba? hay una cámara de vigilancia ¿Tenéis que contarme algo?
La ladrona enseguida confesó, pidió perdón, que lo sentía mucho, etc, el Jefe le dijo que no pasaba nada, que porque lo hizo, etc, al final del día el Jefe consiguió:
1- No perder a una trabajadora y que fuera aún más atenta en el trabajo al sentirse mal.
2- No crear enemistad con su compañera.
La cámara nunca filmó nada, saber mentir para hacer el bien, para contar verdades, es un arte.(Fuente blog de Joan Planas)